jueves, 30 de julio de 2009

92. Pro Reforma II (críticas)

En febrero pasado escribí una crítica a los contenidos de ProReforma, a sus principios y a sus medias verdades. Ahora que está en las sesiones en la Comisión de Legislación, quiero hacer una crítica al fondo de toda la “propuesta estrella” de la Universidad Marroquín.

Esta propuesta no es solo de jóvenes entusiastas que creen que están haciendo un favor al país. No es solo de los académicos hartos de “las hipocresías” y deseosos de encontrar en los radicalismos la verdad. No es “una mano negra invisible diabólica de la oligarquía guatemalteca”. No, es una simple estrategia política, legítima, pero muy peligrosa para nuestra democracia.

El meollo de ProReforma es uno: que un futuro Senado, compuesto por conservadores millonarios, necesitará de un tercio de los senadores para bloquear cualquier intento de impuesto —no digamos de una reforma fiscal— en Guatemala y tendrá el poder para elegir magistrados y blindarse contra cualquier intento de reformas sociales en este país.

¿Por qué digo millonarios? Porque serán los únicos “independientes” que puedan competir sin ninguna institución que los avale. ¿Se imaginan la cantidad de plata que costará ganar un asiento para 15 años en un senado que pueda bloquear impuestos y escoger magistrados? Si la UNE y el PP gastaron más de Q150 millones para llegar a un gobierno de cuatro años... ¿Y quién va a poder competir? Pues millonarios —sucios o limpios— sin tener ni si quiera que esforzarse por construir un partido político.

¿Por qué es tan importante el tema de los impuestos para esta “élite intelectual” de “libertarios” muy conservadores? Porque por medio de impuestos —y fiscalización de los impuestos y un Estado eficiente— es la única manera de reducir las desigualdades en un país. En Guatemala —según el PNUD—, 0.5 por ciento de la población, unas 15 mil familias, recibe casi el 20 por ciento del ingreso nacional. Nuestro Estado recauda solo el 10 por ciento de lo que produce la economía, el más bajo de América. Y lo poco que recauda, lo recauda de manera injusta, pues 75 por ciento proviene de impuestos a las transacciones comerciales, con lo que paga igual el IVA de 12 por ciento el que compra una coca cola en la tienda que el que compra un Porsche. Y para ese 0.5 por ciento es tontamente más fácil un país así.

En el mundo desarrollado y en desarrollo, la proporción es a la inversa, pues por medio de impuestos y educación pública es como se redistribuyen las oportunidades —porque no todos nacemos brillantes, hábiles para los negocios o herederos de negocios—.

Una base impositiva sólida permite la construcción de un Estado sólido, con servidores públicos profesionales, con maestros, médicos, policías, jueces, fiscales o políticos profesionales, éticos y bien pagados, que no se vendan a los narcos o a los empresarios que los compran cuando no les hacen caso.

Un Estado con una base impositiva decente es uno que puede hacer que el peso de la ley caiga para todos, no solo para el que lo puede pagar o comprar. Por eso es tan simpático cuando nuestros conciudadanos que promueven ProReforma hablan de “lograr un estado de Derecho”, cuando sus amigos compran igual políticos, jueces, y demás, cuando les tocan “su estado de Derecho”, por el que ahora tienen que competir con mafiosos.

Creo que la Constitución de 1985, con todos sus defectos y virtudes, deja todavía abierta la posibilidad de construir un Estado. Creo que los diputados más capaces lo tienen claro. Como ciudadano espero que no vayan a echar por la borda esta posibilidad.

martinpellecer@gmail.com

2 comentarios:

Figueroa dijo...

Martin, un enorme gusto saludarte y encontrar tu columna.
Muchas veces la gente que mas "pisto" tiene es la que puede comprar a su gusto y antojo lo que quiera...a mi si me preocupa que no se sabe cual es el rumbo de nuestro pais, es alarmante y ya no se sabe con que noticia nos sale toda esta gente.

Psdt. La verdad duele, y mucho!

Saludos Martin, buenisima columna.
Rosa Figueroa

Javier dijo...

Totalmente de acuerdo con lo que expone en el articulo.

Definitivamente peor-reforma desea concentrar el poder en un circulo socio-economico bien definido atraves del fabulantastico senado.

Solo basta oir los idearios "libertarios" para darnos una muuy clara idea de lo que busca peor-reforma (que el estado solo provea seguridad y justicia) y la salud y educacion, pues solo para los que tengan pisto, porque segun los marro-boys (lo excluyo a ud de ese circulo porque veo que entiende la realidad del pais) los pobres son pobres por haraganes.