martes, 29 de julio de 2008

41. Política: decidir

Política: decidir


La política, sucia, odiada, asaltada… es indispensable. Y es un arte, el arte de tomar decisiones. En nuestro enredo de país –como ha sucedido en el enredo de mundo desarrollado- muchas soluciones pasan por la política, por decisiones políticas.


La paternidad irresponsable no va a terminar nunca, pero por una decisión de los diputados –la ley sobre ADN-, ahora cada mujer puede reclamar que sus hijos tengan legalmente un padre. Una decisión que construye una defensa de las guatemaltecas con una ley de vanguardia latinoamericana.


Los niveles de muertes violentas por armas de fuego no van a bajar de la noche a la mañana, pero (como se hizo en Bogotá o Medellín) los diputados pueden decidir no escuchar a los que hacen negocio con las balas, que alegan a llantos “su derecho a defenderse de los maleantes” (aunque las veces que se dispara por enojo o accidente supera en 42 veces las que se dispara en legítima defensa), y decidir aprobar una ley para restringir la circulación de balas y armas en el país. Así sí baja la violencia.


La mitad (no todos) de los azucareros que no pagan los salarios justos y las prestaciones a sus trabajadores podrían decidir hacerlo y además, no contaminar al medio ambiente. El país podría promocionar entonces azúcar justa, a mejor precio, más atractiva para consumidores europeos y estadounidenses que no sólo quieren pagar por calidad, sino también por productos que no tienen sabor a daño ambiental ni a explotación. Pueden preguntarle a Macintosh o a Starbucks o a empresas del todo el mundo que se someten al equivalente de ISO, pero medioambiental y laboral. Y si no lo deciden así, el Estado podría decidir cumplir la ley y obligarlos.


La Arzúalcaldía capitalina podría decidir dejar de gastar millones en pintar la ciudad de verde perico (el de Arzú en campaña) e invertir ese dinero en comprar parques o bibliotecas. No sé qué reacción tendrían los unionistas dentro de cuatro años si, por ejemplo, el Patriota gana las elecciones municipales y decide pintar banquetas, buses, chalecos de limpiabasuras, andamios, todos los rótulos de la municipalidad, pasarelas y hasta semáforos de color anaranjado. Es un insulto a los ciudadanos de esta “metrópoli”.


Radios de vanguardia musical o algunos programas en televisión podrían tomar decisiones para modernizar el debate político nacional y evitar que los programas “de opinión y debate” sean sólo de paleo-liberales y ultra conservadores.


O si queremos liderar a Centroamérica podemos decidir financiar más de sus instituciones, como la Corte Centroamericana de Justicia, y dejarnos de una vez por todas de ese discurso de quiero pero no hago, quiero sacar 100 de nota pero no quiero estudiar.


El Gobierno podría decidir colocar a técnicos como Slowing en Segeplan y dejar de comprar diputados con obras clientelares, aunque sea para causas que beneficien al país, como Petrocaribe, empresa petrolera estatal-privada o una reforma fiscal. El fin no justifica los medios. Y así, podríamos aprovecharnos del interés chino por invertir en refinerías latinoamericanas (ya lo hará en Ecuador y Venezuela) y abrir relaciones diplomáticas a cambio de esto y de que se incluya el acceso preferencial de los productos de empresarios y cooperativas guatemaltecas en ese mercado.


En fin, decisiones que pueden enderezar esta nave en la que estamos metidos todos.


martinpellecer@gmail.com

2 comentarios:

Figueroa dijo...

Martin, un gusto saludarte.
Violencia, corrupción, desempleo, pobreza, son algunas de las características que hacen resaltar el nombre de Guatemala, todo puede cambiar lo sabemos, pero no actuamos!! Oh Martin mira que no quiero ni siquiera inmaginarme la ciudad pintada de naranja, ya con el verde es mas que suficiente y no se ve nada agradable, eso mas bien hace parecer que el pais es de Arzú y hace lo que se le da la gana con todo y nadie dice nada!!

Si tan solo Guatemala fuera un pais de oportunidades para todos, fuera distinto, pero que es lo que hace mucha gente? Busca mejores oportunidades en otros paises como los USA y Europa en donde SI hay bastante campo para estudiar y trabajar (eso si, no ilegalmente) porque la pobre gente que no tiene papeles la tratan como criminales aunque no lo sean, pero ese es otro tema. Lo que SI seria bueno es que nuestro gobierno se ponga las pilas pero ya!! "recapacite, piense, y finalmente actúe" lo que ofrecieron en los primeros 100 dias, donde está? Lo estarán guardando para cuando ya se acerquen las proximas elecciones?

De veras el gobierno no ayuda... pero el cambio puede ser posible, por lo menos esa es la esperanza para muchos.

Feliz dia.
Rosa Figueroa
rosamariafiguerr@gmail.com

latigo dijo...

...ni siquiera inmaginarme la ciudad pintada de naranja, ya con el verde es mas que suficiente y no se ve nada agradable, eso mas bien hace parecer que el pais es de Arzú....

Un momento.... La capital no es el país.
Esa estólida mentalidad nos tiene a los chapines como estamos. Nos centralizamos en la capital, y dejamos el interior como si no existiera. ¿O no se recuerdan de: Promoción válida solo en la capital. Cobertura sólo en la capital ?
Pocos periódicos en el país, viniendo de la capital. Por eso [repito] el interior está como está de abandonado: Narcos en Zacapa, Izabal, Petén, Huehue, hambruna en oriente, migraciones hacia la capital, un largo etcétera.... ¿verdad?